Hace tan sólo dos días, se cumple un año que lo publique, todo ha cambiado… Lo que respecta a mi sentir hacia ella, por más que no lo quisiera, se ha acrecentado: nostalgia, aprecio, valor, respeto, admiración, anhelo…
_________________________________________________________________________________
_________________________________________________________________________________
La Última Noche
Aquella noche… la última.
Nuestra noche. Un lapso de tiempo en el cual infinidad de
eventos ocurrieron, pero, mientras todos eso sucedía, yo vivía a tu lado el
momento más magnifico y maravilloso de mí existir.
Algo que sé perdurara no sólo en mi memoria, más que eso, en
mi ser, en lo que soy a partir de ese momento, lo que seré; algo que lo cambió
todo.
A lo que me refiero es el momento en que pude mirar “dentro”
de tu «corazón». No es sólo que lo haya visto, sino que, fue posible porque me
lo permitiste, dejándome verte como mujer: compartiendo tus más profundos
sentimientos, escuchando tus temores e inseguridades, mostrándome tu fragilidad
y confiándome tus secretos, esperando con temor que no te juzgara.
¿Cómo podría hacerlo? Sabiendo yo mejor que nadie que quien
merece ser juzgado soy yo, por haberte lastimado: haciéndote derramar lagrimas
por mí, por no valorarte lo suficiente, por no escucharte tanto como merecías;
siendo yo el único quien sabe perfectamente él porque de mis acciones, algunas
egoístas, otras tantas por idiota y no sé cuantas por cobarde; idiota sería al
pedir tu perdón, pues no lo merezco.
Promesas rotas, verdades ocultas, llamadas perdidas.
Espero que si has leído esto, al igual que yo no olvides…
También espero aun, de algún modo, me ames, por mas diminuto que sea.
¡Siempre estarás en mí, Bri!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario